Sobre el yaoi...

Amo esta sección

Bien, hoy mi duda es referente al yaoi, aunque el yuri también entra. Va, al grano, he encontrado varios fanfics donde dos personajes del mismo sexo formalizan su relación y a los demás les da exactamente lo mismo. Mi pregunta surge al asociar esto con la sociedad en general, donde las relaciones homosexuales son discriminadas y muchas personas las consideran asquerosas. ¿Acaso no deberían tomarse de igual manera? ¿O las cosas pueden cambiar?

Ojo: yo no tengo nada en contra del yaoi, mucho menos del yuri. Sólo tengo esa duda.

Gracias de antemano

Me es de una facilidad absoluta inclinar mis balanzas al favor de la creencia de que éste debiera ser un debate, aunque uno demasiado chamuscado, pero al fin del crepúsculo; debate.

Realmente hablar de la homosexualidad es un asunto de comisuras indescriptibles. Es una mentira creer que la aceptación de tal condición pueda llegar a ser tan normal de la noche a la mañana. La sociedad primero requeriría dar un travesía de noches diversas antes de abrirse a aquella posibilidad tan mundana, porque las costumbres —todavía siendo de un tóxico cualquiera— no se quitan sin algún esfuerzo y dolor.

Mi pregunta surge al asociar esto con la sociedad en general, donde las relaciones homosexuales son discriminadas y muchas personas las consideran asquerosas. ¿Acaso no deberían tomarse de igual manera? ¿O las cosas pueden cambiar?

Yo soy partidario de hacer el fic lo más realista posible. Por eso, cuando en un fic se desarrolla una relación homosexual, siempre trato de pensar que pasaría si esa relación se diese en el mundo real, con sus actos y sus consecuencias. O sí la relación se produce en un ambiente de rechazo social a los homosexuales.

Son muchos los fics donde los autores/as, por no meterse en estos berenjenales, optan por poner a los personajes ya conscientes de su condición sexual, o hacer que la sociedad acepta plenamente a los homosexuales. Como ejemplo pongo el fandom de Harry Potter (que es donde más me muevo), donde por ser una sociedad mágica distinta a la nuestra se opta por acpetar a los homosexuales, sin siquiera mencionar si alguna vez hubo rechazo. Recuerdo el fic de PerlaNegra, Manual del Perfecto Gay, donde se retrataba una sociedad mágica con prejuicios a los homosexuales. En este caso, sí que estaba bien hecho.

Yo creo que eso puede depender del fandom y el enfoque que se le dé al mismo.

Por ejemplo, como dice Dexter, en Harry Potter existe la opción de enfocar el mundo mágico como sin prejuicios y simplificar mucho las cosas en ese sentido (con todo, siempre hay que hacerlo bien). En HP podría hacerse porque no hay alusiones ni implicaciones canónicas que señalen lo contrario. El ejemplo contrario sería un fandom como ESDLA. Ahí el slash no puede incluirse como algo natural, porque para empezar el propio Tolkien no concebía esa idea como aceptable.

Entonces depende. Yo apoyo el realismo, pero aquí no hablamos de cuestiones de lógica o naturaleza humana, cuestiones inamovibles. Hablamos de la sociedad y la sociedad puede variar de una ficción a otra. Si vamos a un universo futurista o extraterrestre, ahí las limitaciones de la sociedad actual desaparecen y podemos plantear otras condiciones sin faltar al realismo.

Pues de eso se trata escribir el fic, ¿o no? Donde se pueden establecer pautas ficticias, aunque bien elaboradas, en un universo ficticio.

Por eso creo que en este caso me voy por lo de que depende mucho del fandom y los factores del entorno que estén involucrados. Habría que analizar muy bien en qué tipo de sociedad se desenvuelven los personajes en cuestión. Mi respuesta sería que sí se puede cambiar la percepción de un hecho como este, con todo y la complejidad que involucra. Tan sólo hay que por lo menos dejar en claro cómo se desarrolla la moral y las normas sociales allí fundamentadas.

Ahora, tal vez la confusión viene al haber asociado una relación yaoi presente en un fanfic con nuestra sociedad. Así, ya se va a depender irremediablemente del punto de referencia que se está tomando; que es precisamente el de una sociedad, que como todos sabemos, rechaza tal tipo de conducta.