Cómo elaborar un personaje secundario

Haré un aportecito aquí sobre un asunto tan delicado como la elección de personajes secundarios.

Muchas veces nuestras historias requieren de más personajes que los principales. Los personajes secundarios cumplen con el papel de apoyo en nuestras narraciones, lo que significa que deberán estar en plan posterior a los protagonistas principales. Algunos cuidados deben ser tomados al formar y definir un personaje secundario, ya que si lo hacemos mal, corremos el riesgo de que nuestros lectores tomen nuestro secundario como Mary Sue o self-insert.

- Si hacemos un personaje secundario original (que no sea de ninguna serie, pero sí nuestra creación), debemos describirlo lo mínimo posible. Dar detalles escasos de su aspecto físico y emocional es recomendable, ya que como será apenas de apoyo no requerirá de una explanación larga. De lo contrario robará la escena de nuestro protagonista principal.

Ejemplos:

CORRECTO: "John era su ayudante, su expresión reservada y seria contrastaba con sus ojos oscuros y pelo desordenado."

INCORRECTO: "John era su lacayo preferido, todas las cosas eran mejor hechas por él y su bellísimo aspecto era el delirio de todas las princesas del reino, ya que sus profundos ojos color amatista derretían corazones y sus cabellos graciosamente desordenados le daban un aire juvenil que encantaba a todos."

- Ningún personaje secundario hará el trabajo del principal. Actos heroicos, salvatajes, charlas con otros principales y la mayoría de las acciones hará el principal. Pero eso no significa que debemos arrinconar a nuestro secundario y no dejarlo hacer nada, deberá interactuar con los demás apenas lo necesario

- El personaje secundario deberá ser olvidable. Sí, así como leyeron, olvidable. No hay ninguna razón especial para que el secundario se robe toda la escena y de paso uno se olvide completamente del principal, ya que eso sería una inversión de papeles y deja la historia completamente desviada. El hecho de la descripción concisa de su aspecto, aliado a su ayuda ocasional, es bastante recomendable para que los lectores no desvíen demasiado la atención del principal. Quienes escriben deben tener en cuenta lo siguiente: La historia debe ser elaborada de tal forma que los lectores recuerden apenas a los personajes principales y lo que hicieron en la narración, y no que tengan presente a todo momento quiénes fueron los secundarios y olvidar incluso el nombre de los principales.

- El personaje secundario no tiene más poderes mágicos que el principal, no es más fuerte que el principal, no es más bonito que el principal, no se roba a las chicas o fans del principal, no dice frases más inteligentes que el principal y, principalmente, NO ES EL PRINCIPAL.

Es posible crear una legión de personajes secundariosde esa forma sin que eso afecte la estructura de la historia ni tampoco robe la escena al principal. Con un poco de paciencia y trabajo se logra crear excelentes secundarios que no serán mal vistos por los lectores.